viernes, 11 de febrero de 2011

Cuento para HUGO

Este cuento se lo dedico con todo mi cariño a mi amigo HUGO en su tercer cumpleaños.
FELICIDADES










Había una vez un niño que empezó a ir a la escuela. El era un niño muy pequeño y la escuela muy grande. Cuando descubrió cual era su clase se quedo perplejo de lo grande que era, y se puso muy contento.
Una mañana la maestra les dijo a los niños:
- Hoy vamos hacer un dibujo.
- ¡Que bien! pensó el pequeño.
Le gustaba dibujar por que había aprendido en casa, para la edad que tenia pintaba de todo, trenes, vacas, barcos, peces, etc.
Saco entonces su caja de lapices de colores y empezó a dibujar, pero la maestra dijo:
-¡Esperen aun no es tiempo de empezar! pues todavía nos les he dicho lo que vamos a dibujar, hoy vamos a dibujar flores.
-¡Que bien dijo el niño!le gustaba hacer flores, y la hacia muy bellas con sus pinturas
En esto que la maestra les dijo:
¡Yo os enseñare!
Y tomando las tizas de colores pinto en la pizarra una flor roja con un tallo verde.
Ahora - dijo - podéis comenzar.
El pequeño miro la flor que había pintado la maestra en la pizarra y la comparo con la que ya había hecho el, le gustaron mas las suyas, pero no dijo nada.
Volvió la hoja del cuaderno y dibujo una flor roja con un tallo verde, tal y como la maestra le indicara.
Otro día empezaron hacer trabajos con plastilina
-¡Que bien! pensó el niño.
Le gustaba la plastilina y sabia hacer muchas cosas con ella, pues con anterioridad a ir al colegio ya se entretenía con ella en casa.
Empezo a estirar y amasar su bola de plastilina. Entonces la maestra dijo:
- ¡Esperar yo os enseñare como la tenéis que utilizar!.
Y les mostró como hacer un plato hondo
Cuando el niño vio el plato que hizo la maestra, igual que cuando les mando pintar la flor, le gusto mas el que él hizo, pero no hizo ningún comentario. Solamente volvió a modelar la plastilina, he hizo un plato tal y como había indicado la maestra, pues era un niño prudente y estaba aconstumbrado a obedecer.
En seguida aprendió a esperar a que le dijeran como lo tenia que hacer. No volvió hacer nada solo mientras no se lo indicaran.
Paso el tiempo y sucedió que, el niño y su familia se mudaron a otra ciudad, donde el pequeño tubo que ir a otro colegio, Esta escuela era mas grande que la anterior.
El primer día de clase el profesor de este nuevo colegio, les dijo:
- Hoy vamos hacer un dibujo.
- ¡Que bien! pues como ya sabemos al niño le gustaba mucho pintar, y espero a que el maestro
les dijera lo que tenían que hacer, pero el profe no dijo nada solo caminaba por la clase mirando lo que hacían los pequeños. Cuando llego al lado de nuestro amiguito, le dijo:
- ¿No quieres hacer un dibujo?
- Si contesto el niño, pero ¿Que hay que hacer?
- Puedes hacer lo que quieras, dijo el maestro
Si todos hicieseis lo mismo , y con los mismos colores no vería vuestra iniciativa.
El niño no contesto nada, y bajando la cabeza pinto un "clavel, con su tallo verde y hojas."



FIN

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